Damas y caballeros, en la vida, uno pasa mucho tiempo intentando emerger. Es como estar en una pileta llena de ideas, todas flotando alrededor, y uno se debate entre mantener la cabeza fuera del agua o dejarse llevar por la corriente. Es ahí donde nacemos nosotros, emergente.

Emergente no es solo una palabra linda, es una filosofía, un mantra. Porque, seamos honestos, ¿quién no ha sentido que el mundo del marketing es un océano lleno de tiburones con MBA? Pero no se preocupen, no tienen que nadar solos.

Aquí estamos, listos para emerger junto a ustedes, llevando su marca a la superficie, no con una balsa inflable cualquiera, sino con un yate, o al menos con una lancha rápida. No prometemos milagros, pero sí podemos asegurar que flotarán, y con estilo.

Así que, si sienten que sus ideas están por debajo del nivel del mar, háganos una llamada. En emergente, sabemos cómo salir a flote, sin hundirnos en la paranoia… bueno, al menos no completamente.